Opinión

Patricia Puerto | Responsable Dpto. de la Mujer FeSMC-UGT

Patricia Puerto | Responsable Dpto. de la Mujer FeSMC-UGT

¿Feliz Navidad? No para tantas mujeres

La violencia de género tiene infinitas formas de expresión, algunas muy sutiles. En estas fechas, muchas mujeres tendrán que soportar miradas amenazantes, gestos, broncas que, en no pocas ocasiones, se producirán a ojos de familia y amigos/as, en cenas y comidas de celebración. No permitamos situaciones como estas, alcemos la voz, señalemos al agresor, protejamos a las víctimas.

Se acercan días de convivencia, -en algunos casos forzosa- y, como siempre, es un momento de máximo riesgo para las víctimas de violencia de género dentro del hogar.

Los recursos para ellas ahí están. Disponibles 24 horas al teléfono, un paraguas de grandes profesionales, mujeres también en su mayoría, que trabajarán incansables para atender a las que puedan interponer denuncia o pedir ayuda.

Profesionales aunque afectadas también por la precariedad en sus condiciones de trabajo (contratos temporales, jornadas parciales, bajos sueldos) darán lo mejor de sí en las Navidades. Desde UGT venimos denunciando, desde el año 2018, la precariedad en los servicios públicos de atención a la violencia de género gestionados por empresas privadas.

Como decía, los recursos están. Más o menos desplegados dependiendo de si la zona es más urbana o más rural. Están ahí esperando a que las víctimas den un paso al frente y pidan ayuda (desde el anonimato, si lo prefieren, protegidas en su identidad).

Desde las Asociaciones y Organismos las empezaremos a lanzar mensajes de apoyo, de ayuda, de lucha. ¡Denuncia! ¡Sal de ahí! ¡Saca a tus hijos de ese infierno! ¡No estás sola! ¡Basta ya! 

Pero, ¿y qué les diremos a ellos?

Ellos, los machistas, los que provocarán los episodios violentos, los que montarán “el pollo” delante de sus hijos e hijas por cualquier estupidez, los que causarán miedo y terror en ellas. En navidades, en casa, bajo la mirada del resto de la familia ausentes de toda crítica. Ajenos a las señales del machista, ajenos al ciclo de la violencia que empezará una y otra vez.

Convencida de que, como sociedad, es el momento de decirle algo a ellos y no a ellas. De dar un paso y hacer cambiar el rumbo. Dejar de señalarles a ellas y empezar a señalarles a ellos.

Estas Navidades estate atento y atenta y señala al agresor. No permitamos que utilice sus macabras manipulaciones contra su “compañera”. Alcemos la voz contra los machistas, contra los que maltratan a su familia más inmediata.

Ellos son los que deberían reflexionar, cambiar y dejar de agredir con sus palabras, con sus gestos, con su cuerpo.

Son ellos los que deberían avergonzarse y llamar a un recurso para pedir ayuda, para dejar de maltratar.

Estas Navidades, denuncia, sí, sal de esa relación, pero no dejes de señalar al agresor.

No permitas que el machismo inunde la Navidad con vídeos, chistes, notas que desdibujan el grave problema social que hay detrás.

La bonita Navidad, pero sin machismo por favor.