Los trabajadores y trabajadoras de autobuses urbanos de Algeciras convocan paros durante el mes de octubre

Hoy se ha iniciado la primera de las varias jornadas de huelga -paros parciales- que han sido convocados durante el mes de octubre por el Comité de Empresa de Algesa CTA, empresa de transporte de viajeros contratada por el Ayuntamiento de Algeciras para la prestación del servicio de transporte urbano en la citada ciudad. La jornada de paros de hoy ha tenido el seguimiento del 100% de la plantilla.

Los paros vienen motivados por el incumplimiento por parte de la empresa y el Ayuntamiento de Algeciras de negarse a negociar la remuneración de la antigüedad de los trabajadores y trabajadoras, asunto que quedó plasmado en el acuerdo de mejora firmado el pasado mes de diciembre del año 2019 por la representación de los trabajadores, la empresa y el equipo de Gobierno municipal (con la presencia del alcalde en la firma del mencionado acuerdo).

Además, tenemos que denunciar la baja calidad en la prestación del servicio, achacable a la gestión de la dirección de la empresa y la falta de recursos. Por ello, desde UGT -cuyos órganos ejecutivos estatales y regionales han apoyado esta convocatoria de huelga- requerimos a Algesa que adopte las medidas correctoras necesarias para la prestación de un servicio de calidad, que refuerce con nuevas contrataciones personal en talleres, para un mejor mantenimiento de la flota actual.

Incumplimiento de los acuerdos

Cuando se produjo la nueva contratación para la prestación del servicio de transporte urbano, la nueva empleadora comunicó, literalmente, a la plantilla “que no existirán consecuencias jurídicas alguna para los trabajadores, más allá del cambio de la titularidad del servicio, no afectando a los derechos y obligaciones derivados del contrato”.

Es reseñable que desde que se produce la subrogación a esta nueva empresa, el trato hacia la plantilla subrogada está siendo, en cierta medida, degradante, de desconfianza.

En definitiva, tras estar más de 4 años en concursos de acreedores, la subrogación a la empresa pública debía proporcionar cierta estabilidad laboral, pero ha sido todo lo contrario. Por todo ello, y ante las dificultades para revertir esta situación, los trabajadores y trabajadoras de Algesa se ven abocados a la huelga.