Es prioritario y urgente desarrollar la Unión Social

Intervención de Pepe Álvarez en la Conferencia de mitad de mandato de la Confederación Europea de Sindicatos.

El Secretario General de UGT, Pepe Álvarez, ha afirmado que “hay que desarrollar de forma prioritaria y urgente la Unión Social, y para ello, es necesario reformar la injusta e ineficaz gobernanza económica de la Unión”.

Álvarez ha hecho estas declaraciones durante su intervención en el panel “Hacia una nueva política económica: inversión para la creación de trabajos de calidad. Reformando la gobernanza económica europea”, en el marco de la Conferencia de mitad de mandato de la Confederación Europea de Sindicatos (CES): “S.O.S. Europa para las y los trabajadores”, que se desarrolla en Roma.

Álvarez ha defendido responder “a la urgencia económica y social” y recuperar la esperanza de los trabajadores y de los sectores más afectados por las crisis y las políticas que se han llevado a cabo, estableciendo un plan de salida de la crisis en torno a varios ejes: cambiar  las reglas europeas y apostar por políticas de crecimiento y empleo;  e implantar políticas fiscales comunes y replantearse el presupuesto comunitario (el raquitismo del presupuesto, las tendencias a transformar muchos países en paraísos fiscales, o incitar políticas de exportación agresivas son indicadores de la anteposición de los intereses nacionales sobre los europeos).

Asimismo, propone potenciar el diálogo social y reforzar la participación de los trabajadores para un reparto más justo de la riqueza; y complementar el semestre europeo con un semestre social, de igual valor y obligatoriedad.

El Secretario General de UGT ha señalado que las políticas de austeridad han tenido un efecto nocivo sobre la calidad de vida de los trabajadores  y las trabajadoras y han provocado una profunda desafección de la ciudadanía hacia las instituciones europeas, surgiendo movimientos populistas y provocando el repliegue hacia los intereses nacionales. 

La UE -ha manifestado- ha reaccionado a la crisis económica mundial centrándose exclusivamente en las limitaciones presupuestarias públicas y las exportaciones – reformas estructurales para flexibilizar el mercado laboral, recortes en el gasto público, los servicios y la protección social, depresión de los salarios y el desmantelamiento de la negociación colectiva. Políticas -ha señalado- “que no han resuelto ninguno de los problemas a los que se enfrenta nuestra economía, pero en cambio ha generado una recuperación más pobre, estancamiento y deflación, niveles inaceptables de desempleo y precariedad, pobreza y exclusión social y la acentuación, sin precedentes, de las divergencias en Europa. Estas políticas económicas han olvidado conscientemente la dimensión social»,  ha dicho Álvarez.

Ha remarcado  que las políticas de austeridad y de reformas estructurales, tal y como están concebidas, tienden a que los derechos sociales y laborales se utilicen como “variables de ajuste”, es decir se busca compensar las pérdidas de competitividad por la vía salarial y social, pues ahora no se pueden competir en base a la devaluación de la moneda.  De tal manera, que las normas sociales son consideradas como simples variables residuales de los procesos de ajuste macroeconómicos.

Por eso, es hora de hacer frente a “la crisis existencial” europea y dar un salto adelante, aplicando otras políticas que reviertan la desafección ciudadana.