Seguras en casa, seguras en el trabajo #niunamenos

Celebrada en Madrid la Conferencia “Safe at Home, Safe at work,” organizada por la Confederación Europea de Sindicatos, en el marco del proyecto que pretende definir la estrategia sindical a escala europea para prevenir, gestionar y eliminar el acoso y la violencia contra las mujeres en el lugar de trabajo.

Los días 24 y 25 de noviembre se ha celebrado en Madrid la Conferencia “Safe at Home, Safe at work,” organizada por la Confederación Europea de Sindicatos, en el marco del proyecto que pretende definir la estrategia sindical a escala europea para prevenir, gestionar y eliminar el acoso y la violencia contra las mujeres en el lugar de trabajo.

En la Conferencia, a la que ha asistido una delegación de FeSMC-UGT, han quedado patentes las razones de por qué la violencia contra las mujeres es un asunto de los sindicatos y se han analizado e intercambiado experiencias desarrolladas en los diferentes países sobre los siguientes objetivos:

– Desarrollar y mejorar los instrumentos y los conocimientos de los sindicatos para abordar el acoso y la violencia en el trabajo;

– Incluir el acoso y la violencia contra las mujeres en las agendas de la negociación;

– Promover y mejorar la transversalidad de género en la organización del trabajo, en la negociación colectiva y el diálogo social;

– Compartir iniciativas de éxito de los sindicatos y/o los interlocutores sociales para eliminar el acoso y la violencia en el trabajo;

– Elaborar materiales para concienciar a un público más amplio sobre la necesidad de incluir sistemáticamente la perspectiva de género a la hora de hacer frente a la violencia y el acoso en el lugar de trabajo y hacerla extensible a nivel sectorial y nacional;

– Hacer recomendaciones y contribuciones concretas a la propuesta para una norma laboral internacional sobre la violencia en el trabajo.

Durante dos días se han planteado los retos a los que se enfrentan los Sindicatos en la lucha contra el acoso y la violencia de género en el trabajo, como la creciente precariedad laboral, las nuevas formas de organización del trabajo y la presión laboral consiguiente, que han contribuido a un aumento de los niveles de acoso en el trabajo y a la invisibilidad del problema.

La crisis económica y las medidas de austeridad han dado lugar a recortes en la financiación de servicios esenciales, incluida la financiación de apoyo especializado en materia de violencia de género, que han incrementado el riesgo de violencia y acoso en el trabajo.

Durante la conferencia, se han destacado algunos ejemplos de medidas recogidas en planes de igualdad de nuestros sectores que mejoran lo establecido en relación a la protección de las trabajadoras víctimas de violencia de género como Zena, Lidl y Decathlon. Así mismo, desde FeSMC-UGT hemos señalado la necesidad de establecer mecanismos de seguimiento y control de la práctica de las disposiciones formales y de la eficacia de las acciones, así como de los Protocolos de actuación y prevención del acoso sexual y por razón de sexo, fruto de la negociación entre empresa y sindicatos.

Por último se han recogido una serie de recomendaciones dirigidas a los miembros de la Ces, entre otras:

Dar prioridad al diálogo social entre empresas y sindicatos a la hora de pactar conjuntamente agendas, procedimientos e iniciativas de sensibilización entre responsables y trabajadores;

Asegurar que las mujeres ocupen puestos de responsabilidad en las negociaciones, como un elemento crítico a la hora de incluir problemas de violencia de género y acoso sexual en las agendas de negociación;

Elaborar directrices tipo y formar a los representantes de los centros de trabajo para negociar acuerdos y políticas contra la violencia y el acoso sexual en el trabajo, y prevenir la violencia doméstica contra las mujeres en el trabajo.

Asegurar que las iniciativas de salud, seguridad y bienestar en el trabajo incluyen una clara focalización en las causas y las soluciones al acoso y la violencia de género en el trabajo, teniendo en cuenta desigualdades de género y discriminación.

Facilitar información y apoyo a las trabajadoras que sufren acoso sexual y violencia de género.

Fomentar que líderes sindicales, hombres, conciencien públicamente y defiendan un enfoque de tolerancia cero respecto a la violencia contra las mujeres. 

Ejercer presión para que se incluyan medidas para abordar el acoso sexual y la violencia doméstica en el trabajo y los derechos laborales de las víctimas de violencia de género en los planes de acción nacionales del gobierno sobre violencia contra las mujeres. 

Implementar medidas para abordar la violencia de género en los acuerdos de diálogo social sectorial europeos y en declaración conjunta.